La generación de energía es un problema que viene acuciando a todos los países, el crecimiento de la construcción, de mano de la tecnología es cada vez más crítico.
Otros de los problemas que genera la misma tecnología, es el tratamiento de los residuos, otro de los problemas en el mundo.
En Suecia, unieron los dos problemas y encontraron una solución ideal, con los residuos generan energía.
Diseñaron una planta en las afueras de la ciudad de Gotemburgo, en la que entran toneladas de basura, que antes iban a vertederos, que ahora se aprovechan en la plata.
La basura es quemada, aprovechándose el calor y gases de incineración para convertirlo en energía.
El sistema utiliza elementos reciclables como vidrio, papel, materiales orgánicos, y el resto pasa por otro proceso.
Para ello, el principal factor es la conducta ciudadana, los Suecos proveen de su basura, separada en los contenedores adecuados para facilitar el proyecto, lo que ahorra en tiempo, y obtienen de beneficio una energía segura, no contaminantes, más barata, pudiéndose generar, además, cercana a los lugares en las que se necesita por lo que transportarla tampoco es un gasto.
Un ejemplo de voluntad, en Suecia más del 90 por ciento de la basura se recicla, solucionando también el problema de la basura, una cuestión no sólo de espacio sino también de salud.
Las estaciones de reciclaje están distribuidas y cercanas a las zonas residencias, por lo que se benefician grandes áreas que además ahorran en el traslado de la basura.
Las plantas de reciclaje incluso, trabajan por debajo de su capacidad, por lo que han comenzado a importar basura, teniendo en cuenta que los países pagan para deshacerse de la basura, la ecuación generación de energía, proporción de insumos, hace que la economía de este tipo de energía convenga, no sólo en aspectos técnicos, sino en salud, mantenimiento, autonomía climática, distancia.
Suecia no sólo es un ejemplo de solución para sí mismo, sino para sus países vecinos que exportan su basura, agradecidos de sacársela de encima.
Siempre se ha puesto trabas a la generación de nuevas fuentes de energía, el proceso de generación suele ser más caro que el producto final, o los procesos son contaminantes, Suecia ha encontrado una excelente combinación que evita dos problemas fundamentales de la modernidad, la falta de energía, el exceso de residuos, ojalá el resto de los países empezaran a comprender la urgencia en imitar esa idea.
En Argentina hay una ebullición importante de nuevos emprendimientos constructivos, es una geografía ideal para probar esta solución.